Los (malos) obituarios saturan los buscadores

Con ocasión de la muerte de Jacques Perrin. Y con los algoritmos de búsqueda las noticias de la muerte de un artista son las que aparecen primero, y hay que irse directamente a la página 30 para encontrarse algo decente que no sea un puré de tópicos preparado por un iletrado de agencia, y siempre con sus «éxitos más populares», la etiqueta, para unos Paradiso, para otros Blade Runner… No digamos ya como sea algún gran actor que ha tenido la desgracia de participar en una saga supercomercial tipo Harry Potter o James Bond.