The last picture show de la Filmoteca en Sarrià

Hace 10 años (21 de noviembre de 2021) cerraba la Filmo de Sarrià con, lógicamente, la preciosa The Last Picture Show de Bogdanovich, aunque los últimos de Filipinas lo celebramos más como la patrulla saltando las alambradas de La Cruz de Hierro de Peckinpah 😉. La sala Aquitània que la albergó ha acabado por cerrar sus puertas este pasado 18 de febrero.

6 de julio de 2020. El teatro Aquitania vuelve a reabrir sus puertas (Gracias Gustau)

14 de noviembre de 2011. El próximo lunes 21 de noviembre cierran la sala de proyecciones de la Filmoteca en el Cine Aquitania. Mi trayectoria sentimental pasa más por la de Travessera de Gràcia, pero de todas formas iré a despedir esa sala fría (o agobiantemente calurosa depende de las estaciones) e inhóspita porque lo que fue importante fue lo que experimentamos en su pantalla, no en la platea (cuidado con la traicionera nostalgia, aún echaremos de menos la insoportable incomodidad de sus butacas en las proyecciones largas 😉¡Qué vibrante y curioso es el estado juvenil! Como he planteado antes, en la Filmo de Sarrià ha sido más importante la pantalla que la platea, mientras que en los turbulentos y maravillosos días de la Flimo de Travessera de Gràcia era casi igual de importante lo que sucedía en la platea, en la calle y en los bares y en las camas de los alrededores que lo que propiamente fluía del proyector, muchas veces puro detonador de todo lo demás, que se llamaba vida.

Obra de Carlos Azagra, proviene de su Twitter. La imagen aparece también en la excelente web que evoca la pizzería en Barcelofilia.

[¿A dónde irá] En el Raval, de donde salió en su día. En Robadors, muy cerca de su Cera original, ¿o tal vez no? (…) Edad no, se dice madurez 😉. O «tengo la suficiente experiencia para recordar…» «Podría ser tu padre/madre» es lo menos sexi que se puede decir en un argumento a la salida de la Filmo (y recuerda que como he dicho en su época eran más importantes los bares y las camas de los alrededores). Mizoguchi una excusa para hablar de «tus ojos», Oshima no te digo 😉

Era un sitio de referencia obligada, pero yo era un crío y recuerdo alguna tímida incursión, ante las miradas de indiferencia de nuestros hermanos mayores. Por cierto ¿no serás tu una de las hermanas mayores que nos miraba mal? jajajaja. No, si lo digo por «qué hará este crío en a filmo, y en un bar a estas horas» 😉 La Rivolta, mítica estación de paso de la efímera primavera pero persistente alma (sí, se puede ser las dos cosas) libertaria de Barcelona. estoy totalmente de acuerdo. Con el puretismo de la juventud antes me molestaban… hasta que me dí cuenta que la gente joven que acude ahora los miércoles obligados a l’Aula de Cinema (y bienvenidos sean) nos debe empezar a ver como nosotros les contemplamos como a ellos. Es cierto que a veces comentan las cosas demasiado en alto o se ríen a destiempo, pero últimamente al escucharles me he ido dando cuenta que han visto y saben un montón de cine (tal vez no justo del que me guste pero eso es problema mío) y ahora ya son parte de un paisaje que espero que tarde en desaparecer… aunque sigan creyendo que Los hermanos Lumière eran Ridley y Tony.